Análisis: El Profesor Layton y la caja de Pandora
El Profesor Layton y su ayudante Luke vuelven a las pantallas de nuestras consolas para resolver un nuevo misterio. ¿Qué es la caja de Pandora y qué relación tiene con la muerte del mentor de Layton? Para solucionarlo tendrá que subirse al Molentary Express, un tren de lujo con destino desconocido, y buscar pistas en los pueblos que forman su ruta. Nosotros le ayudaremos resolviendo los puzzles que se le presentan en su aventura.
Hace dos años apareció en nuestro paÃs un extraño juego que era una aventura gráfica en la que los puzzles habÃan dejado de consistir en encontrar objetos y averiguar como usarlos para convertirse directamente en puzzles clásicos. El profesor Layton era un arquéologo que debÃa enfrentarse al misterio de un pueblo del que iban desapareciendo personas. Durante el transcurso de su aventura conoció tanto a amigos como enemigos, y acabó resolviendo el misterio con el aplomo de todo un caballero inglés.
En esta nueva aventura se reencuentra con varios de los personajes de la anterior entrega, aunque suponen que los conocemos y aparecen sin explicarnos quienes son y qué hacen allÃ. Cuando el detective Chelmey aparece y Luke sin mediar palabra estira de la piel de su cara porque intenta arrancarle una inexistente máscara, tenemos que haber jugado al anterior juego para saber que el motivo es que la némesis de Layton se habÃa hecho pasar por el policÃa. Y cuando Flora aparece en el tren tampoco nos dicen quien es.
Obviando estos detalles que realmente no son importantes para disfrutar del juego, la historia está tan bien presentada como en La Villa Misteriosa, con escenas mostrando la acción con un maravilloso diseño de animación japonesa clásica. Estas escenas son cortas pero bastante abundantes. Lamentablemente la historia nos acabará recordando sin duda a la anterior, sobre todo a medida que nos vamos acercando a su final.
La música es muy parecida (en ocasiones parece idéntica) al juego anterior, con melodÃas con predominio de acordeones. En los puzzles hay una que se mantiene al mismo volumen que durante la aventura, y acaba resultando muy molesta. Esta vez las voces están en castellano. Aunque las inglesas les pegaban mejor a los personajes, sobre todo a Layton ya que en castellano resulta inexpresivo, se agradece el esfuerzo. No es un juego mal doblado ni mucho menos, aunque el rango de emociones que muestran los personajes en un juego como este sea bastante escaso.
El control del juego es idéntico a la primera parte. Layton se va moviendo por un escenario compuesto por pantallas estáticas, en las que hay varios puntos por los que se puede salir. En la pantalla superior se muestra un mapa de la zona para ver hacia donde nos estamos moviendo. En la pantalla inferior encontraremos el trozo de escenario en el que estamos, con sus personajes y puzzles escondidos. Con el stylus podemos señalar cualquier punto y ver qué hay. Si hay un puzzle Layton y Luke lo intentarán resolver, si es un personaje hablarán con él, si hay una moneda escondida la encontraremos.
El menú está accesible pulsando sobre el «baúl» del profesor, y allà encontraremos todas las opciones, desde grabar el juego, ver los puzzles descubiertos, qué misterios tenemos pendientes o jugar a alguno de sus extras.
Cuando llega el momento de resolver un puzzle, nos lo presentarán con el enunciado en la pantalla superior y una zona en la inferior en la que deberemos resolverlo. Si el puzzle consiste en mover objetos, por ejemplo, podremos hacerlo directamente sobre la pantalla moviéndolos con el stylus. Si tenemos que introducir la solución manualmente podremos escribir las letras o números que corresponda. En todos los casos tendremos acceso a la opción de «notas» en la que podremos escribir libremente en la pantalla, en una especie de pizarra transparente que se superpone al puzzle.
Si nos atascamos podremos comprar hasta tres pistas pagando una de las monedas que hemos encontrado por el escenario. Hay suficientes monedas para que no nos quedemos atascados nunca en un puzzle.
Todos los personajes que encontramos tienen uno o más puzzles para Layton, y le irán dando pistas sobre el misterio del juego a medida que se los vaya resolviendo. Aunque al principio los puzzles parecen estar muy integrados en la historia (arreglar el mapa para llegar a su destino, averiguar en qué piso vive a quien van a visitar…) luego dejan esto de lado ya que serÃa muy dificil conseguir integrarlos todos de esta manera, y vuelven a ser simplemente ofrecidos por los personajes, situaciones o escenarios que encuentran.
Esta entrega tiene más puzzles que la anterior (exactamente 138) y aunque son nuevos se basan en los mismos tipos que la primera parte: mover fichas dentro de un puzzle para ordenarlo o sacar una pieza, laberintos, recortar figuras o apilarlas, nudos de cuerdas… aparte de los clásicos más basados en matemáticas o situaciones cotidianas. En esta parte han dejado bastante de lado los acertijos de la primera, adivinanzas o situaciones que habÃa que resolver teniendo en cuenta el sentido común en lugar de explicarlo claramente en el enunciado del puzzle. Aunque algunas veces pareciese que se llegaba a la solución con trampas siempre habÃa una lógica tras el problema.
En esta aventura los puzzles son más de prueba y error: mover un caballo por un tablero de ajedrez, sacar una bola de un laberinto, comer fichas de un tablero de damas.. y muchos los encontramos múltiples veces lo que hace que la variedad de puzzles sea mucho menor y en mi opinión menos interesante.
El juego no es muy largo, se puede acabar en 12 horas. Una vez has averiguado la solución de un puzzle ya no hay ningún aliciente para volverlo a resolver, asà que la rejugabilidad no es muy grande. Por suerte una vez terminada la historia principal puedes seguir jugando buscando los puzzles que te hayas dejado por el camino o con alguno de los varios extras que contiene el juego. Hay puzzles descargables semanalmente, una cámara que recomponer si encuentras todas sus piezas mientras resuelves los puzzles de la historia, un hámster al que tienes que poner en forma, una tetera para hacer variedades de té y dárselas a probar a los personajes del juego… No es mucho, pero cualquier idea para alargar la vida de un juego siempre es bienvenida.
Profesor Layton y la caja de Pandora es un buen juego. Ha perdido la originalidad de la primera parte y la inmensa calidad y variedad de sus puzzles, pero sigue siendo un juego muy recomendable y con el que disfrutaremos durante mucho tiempo.
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