Análisis: 1 Moment of Time: Silentville
No recuerdo haber encontrado nunca errores graves en los juegos a los que juego que me estropeen la partida. Hasta ahora, claro está. En el último puzle del juego me quedé atascado porque no podÃa seleccionar uno de los objetos. Hay que crear una poción con cuatro ingredientes, en el tercero dejó de funcionar y al intentar ponerlo en el bol no pasaba nada, y no podÃa interactuar con ningún otro elemento del puzle.
Por suerte es el único error que encontré, pero como no puedes saltarte ese puzle tuve que repetir la partida. Tuve que hacerlo cinco veces, es lo que pasa cuando quieres conseguir todos los logros y no caes en la cuenta que «completar la partida sin saltar ni pedir pistas» no quiere decir saltarte los mini juegos si no las escenas exponiendo la historia.
Normalmente no habrÃa repetido la partida tantas veces, es algo que hay que concederle a este juego: por más errores que tenga y que no han solucionado los desarrolladores tras varios meses, sigue siendo lo bastante interesante como para perseverar hasta conseguirlo.
La historia tiene tintes sobrenaturales: una siniestra tormenta llega al pueblo y hace desaparecer a la mayorÃa de la gente, cualquiera que llega también se ve afectado y no puede salir de allÃ. Tu misión consistirá en descubrir el origen de la maldición, salvar a sus habitantes y naturalmente escapar antes de que te veas afectado. Las pocas personas que quedan en Silentville te explican sus historias (que ya hemos establecido que no puedes saltar si no quieres perder un logro) y son lo bastante curiosas para una historia sencilla como esta.
El desarrollo es el tradicional de una aventura gráfica simple. Desde la estación de tren a la que llegas saldrás a las escasas calles del exterior, visitando el cuartel de policÃa, ayuntamiento y varias tiendas, hasta que llegues entre otros lugares al faro y la mina del pueblo. La cantidad y variedad de escenarios es bastante amplia y todos mantienen un nivel gráfico consistente entre ellos, aunque no sean especialmente detallistas. Descubres nuevos lugares a un buen ritmo, y nunca sientes que te hayas quedado atascado y no avances. Si fuese asÃ, puedes pedir pistas para que te digan qué hacer a continuación, consultar el mapa para desplazarte rápidamente a otro lugar o leer el diario y ver qué tienes pendiente por hacer.
Normalmente todos los puzles que encuentras son bastante lógicos, o se pueden solucionar con los objetos que tienes a mano. Quitar el cristal de una venta usando la ventosa de un desatascador no es lo más normal del mundo, pero en ese momento no tienes muchas más posibilidades. Cortar una enorme espina de un rosal para ponerla en las brasas y encender una lámpara de aceite con ella sin quemarte ya no es algo que hagas cada dÃa. Pero normalmente los objetos son fáciles de encontrar y la parte de aventura está bien resuelta.
Los minijuegos son bastante variados e imaginativos. Desde los tÃpicos de recomponer algún retrato a partir de sus piezas o de conectar tuberÃas hasta otros de lanzar pelotas en unos cubos, recoger flores que van floreciendo y marchitando con rapidez o clasificar alfombras por color. Es en uno de estos minijuegos donde encontré el error que me forzó a reiniciar la partida, pero por lo visto la mayorÃa se pueden saltar (no lo hice nunca y no puedo asegurarlo).
Siendo un juego de objetos ocultos, han hecho también un buen trabajo en este apartado. Cada una de estas escenas tiene objetos que puedes encontrar directamente y otros que tienes que descubrir (abriendo cajones, por ejemplo), combinar o crear de alguna manera. Ya sea cortar un salami con un cuchillo y luego ponerlo en la pizza, buscar las teclas de un piano o pintarle los labios a un maniquÃ, algunos de los objetivos son divertidos y se salen un poco de la norma de lo que suele verse en este tipo de escenas.
Lo malo es que en la versión de Steam, que es la que he jugado, han cambiado el recuadro de la pantalla donde aparecen los objetos a buscar y han colocado un botón «Back» encima, lo que hace que cualquier objeto que estuviese en esa zona es prácticamente imposible de encontrar. Y en cada escena siempre hay al menos uno. Las primeras veces te desesperarás buscando esa llave elusiva que no está en ningún lugar hasta que encuentres unos pixeles de color gris en la parte inferior de la pantalla y pulses por si acaso… Luego te acostumbras y ya no es ningún problema, excepto por el hecho de que tienes que pasar con el cursor para ver si detecta algún objeto en lugar de ser tú el que lo encuentre mirando.
Es una verdadera lástima que un juego que podrÃa destacar en un género que suele crear trasfondos e historias sin imaginación y repetitivas se vea lastrado por estos errores de programación que no deberÃan existir, o que deberÃan ser solucionados rápidamente cuando los jugadores los reportan al desarrollador. Pero en el estado en el que está es una apuesta el poder disfrutar de una partida sin problemas, y no lo hace nada fácil de recomendar.
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